Un poco de historia...

En 1976, en una habitación del centro histórico de Figline Valdarno, por iniciativa de Alváro Monsecchi, nacía Anna Sarri, empresa que lleva el nombre de su esposa: es la única producción artistica de asas y mangos en plexiglás y madera (este último luego envuelto en cuero o posteriormente laqueado), para paraguas y bolsos de lujo. Alváro, con la ayuda de su yerno de apenas veinte años, Marco Gonnelli, trabaja los materiales antes mencionados completamente a mano, utilizando cortadores, ruedas y discos. Siguiendo la solicitud de un cliente, se fabrican mangos con cabezas de animales (pato, perro, caballo y elefante) también para bastones de paseo o decorativos. En 1982 la sede se mueve a una sala más grande en el centro histórico del país y en 1987 la compañía cambia su nombre para convertirse en Monsecchi Alváro, con el propietario ahora retirado. Este es el año en que un joven en una tienda de ropa para hombres, Alessandro Naldini, le propone a Alváro que cree un prototipo de percha en madera. Este es el verdadero punto de inflexión: con el solo boca a boca entre las diversas compañías, la producción de perchas supéra la producción anterior de asas. Llegan clientes del calibre de Prada y Fendi y comienza la realización de varios prototipos, a petición del cliente.

En 1992 Marco Gonnelli entra al mando de la compañía, la cual toma así su nombre actual. Alvàro continuará durante otros quince años trabajando junto a su yerno, y las iniciales AM quieren recordar precisamente al hombre que, con tanta pasión y dedicación, empezò esta actividad. En el mismo año, parte de la sala se renova y se crea una vitrina para la venta al por menor: flores de madera, cajas de joyas, pulseras y anillos, junto con las perchas, los bastones de paseo y los paraguas, hacen su primera aparición al público. Mientras tanto, se siguen encontrando grandes satisfacciones en el sector de la alta moda: AM es el protagonista del desfile de moda de Gianfranco Ferré con joyas hechas de maderas preciosas; trabaja miles de asas de bambú para bolsos de Gucci; comienza la producción continua de las perchas de Salvatore Ferragamo y, para el prestigioso museo de la casa de moda en Florencia, también creará algunas exclusivas hormas para zapatos en plexiglás. Gracias al éxito alcanzado en los diversos años de actividad, en 2006 nace la necesidad de ampliar los espacios de la empresa; AM mueve a su ubicación actual en el municipio de Reggello, donde Marco Gonnelli, confiando en la mano de obra de personal calificado, sigue trabajando la madera y el plexiglás con el mismo cuidado y el arte de cuando todo empezó.